El próximo 13 de julio, el mayor buscador de Internet prohibirá los anuncios de "créditos rápidos", también conocidos como "créditos fáciles". Es esa publicidad en la que ofrecen préstamos a muy corto plazo, pero con unos intereses altísimos y, a veces, con elevadas comisiones.
Hay que recordar que ya se había vetado la publicidad que aludiera a armas, tabaco, explosivos y drogas recreativas. Pero en el terreno de la publicidad financiera engañosa, el gigante tecnológico tiene mucho trabajo de vigilancia por delante.
Concretamente, donde se va a poner la veda a partir del mes que viene, será en los anuncios de préstamos en los que el pago deba realizarse en 60 días, después de ser concedido, o que carguen un interés superior al 36%.
Para los que siempre hemos tratado de defender al pequeño inversor, es una gran noticia que el principal buscador de la Red esté haciendo un esfuerzo por "proteger a los usuarios de productos financieros engañosos o dañinos", como ha declarado su director de producto global.
Más allá de los créditos rápidos, los ahorradores se topan a diario con anuncios cargados de mala intención, que apuntan a su necesidad de aumentar rápidamente sus ingresos, bien sea para llegar a fin de mes o por la recurrente ilusión de vivir en la abundancia económica.
Un claro ejemplo de publicidad financiera engañosa son los anuncios para captar inversores de bolsa, con mensajes provocativos al estilo "hágase rico jugando a la bolsa" o "sáquese un sueldo extra" y, últimamente, con supuestos casos de jóvenes que ganan miles de euros al mes gracias a las opciones binarias y otros productos de alto riesgo similares.
Se podrían mencionar muchos más ejemplos, pero lo que nos tiene que quedar claro, para empezar, es que en la bolsa no se juega, sino que se invierte. Además, es una carrera de fondo y nadie se hace rico con ella de la noche a la mañana. Requiere seguir una estrategia, analizar cada valor, tener paciencia, pero, sobre todo, es necesario el sentido común..
Si alguien teclea en Internet "curso de bolsa" o "curso de trading", los primeros resultados que va le van a salir son anuncios de cursos gratuitos donde, supuestamente, le van a enseñar a ganar dinero en bolsa con estrategias tan descabelladas como operar en el intradía, que es la forma más segura de perder. Y no solo lo digo yo, sino Robert J. Shiller , Premio Nobel de Economía 2013.
Otro de los despropósitos a los que lanzan a la gente a través de este tipo de publicidad financiera engañosa es a utilizar productos apalancados, cuando ni siquiera tienen experiencia operando en contado. Es como querer competir en Fórmula 1 antes de sacarse el carnet de conducir.
Pero la cuestión de fondo que tendrían que plantearse todos los usuarios que ven estos anuncios es por qué estos cursos son gratuitos.
La respuesta la encontrarán en las personas que los imparten. Suelen ser brókers que organizan esta formación como vía de captación de futuros clientes, a los que tratarán de convencer para abrirse una cuenta del orden de 10.000 euros aproximadamente. El bróker se llevará las correspondientes comisiones e intereses o, lo que es peor, si es un "market maker", ejecutará contraórdenes en cada operación para que sea usted quien pierda, mientras él gana y se queda con todo su dinero.
En otros casos, los cursos de bolsa no son gratuitos, aunque son impartidos por personas con muchos conceptos teóricos aprendidos, pero con poca o ninguna experiencia como operadores o gestores. No han demostrado su valía en el mundo de las finanzas y lo más sorprendente es que ninguno de sus alumnos gana en bolsa.
La esperanza que nos queda a los profesionales que llevamos años dedicándonos tanto a la gestión como a la formación en bolsa es que en la Red se continúe esta línea de actuación contra la publicidad financiera engañosa y se acabe separando el trigo de la paja, por el interés de todos inversores.